GESTIÓN DEL RIESGO DE LAVADO DE DINERO Y ACTIVOS
Claudia I. Argueta T.
Cristina Abigail Maldonado
Licenciadas en Contaduría Pública
Estudiantes - MAF
Universidad de El Salvador
klaudiaargueta21@hotmail.com
crisabi5@yahoo.es
crisabi5@yahoo.es
Introducción
El
riesgo es un concepto que existe prácticamente en todos los ámbitos de nuestras
vidas, y en todas las actividades que se realizan; por consiguiente las
empresas también se encuentran expuestas a enfrentarlo en todas sus operaciones
diarias; y es por ello que a través de los años se ha buscado la manera de
protegerse ante las inminentes amenazas, tanto internas como externas, y tratar
de minimizar el impacto que estas pudieran ocasionar para la sostenibilidad de
los negocios.
Sin
embargo, entre la gran variedad de riesgos que podemos identificar en un
sistema económico, el que capta nuestra atención para el presente documento es
del Riesgo de Lavado de Dinero y Activos, ya que es un tema que en los últimos
años ha tomado importante auge por el crecimiento de la delincuencia
organizada, convirtiéndose en una verdadera amenaza para los negocios hasta el
punto de que puede llegar a ocasionar la desaparición de una organización. Pero
¿de qué manera el Riesgo de Lavado de Dinero y Activos logra afectar a las empresas
que conforman el sistema económico de un país?, ésta es una temática que se
abordará en el primer apartado de este ensayo, analizando las principales
implicaciones a través de las distintas modalidades en que actúan las
organizaciones criminales para involucrar a las empresas en sus actividades
ilícitas.
Por
lo anterior, y considerando que el Riesgo de Lavado de Dinero y Activos es uno
de los riesgos que mayor daño pueden ocasionar a las entidades, otros puntos a
considerar son ¿de qué manera las empresas se ven expuestas a este riesgo?, y
¿cómo pueden enfrentarlo para mitigar el
impacto en sus operaciones cotidianas? Bajo este contexto, se hace necesario
conocer hasta qué medida la probabilidad de enfrentarse a una situación
relacionada al lavado de dinero y activos se ve disminuida con la creación de
una cultura organizacional basada en una “Gestión Integral de Riesgos” que
permita la identificación, valoración, gestión y control del Riesgo, a través
de la implementación de diferentes herramientas en cada una de las áreas que
conforman la entidad y en los diferentes procesos y operaciones que se
relacionan con su actividad; contribuyendo al establecimiento de un Sistema de
Prevención contra el Lavado de Dinero y Activos que permita identificar oportunamente
cualquier actividad sospechosa y facilite la toma de acciones al nivel
jerárquico correspondiente.
1. El riesgo de Lavado de Dinero y
Activos y sus Implicaciones
La
inminente globalización de los negocios ha ocasionado que las empresas y sus
administradores se encuentren expuestos, a convertirse en medios o
facilitadores para que las estructuras
delincuenciales logren invertir, ocultar, sustituir o transformar y restituir a
los circuitos económicos - financieros, el dinero
y activos obtenidos por el desarrollo de actividades ilícitas. Es por ello, que
las empresas deben estar preparadas para enfrentar cualquier situación que les
lleve a verse involucradas en operaciones sospechosas o actividades de carácter
ilícito. Para lograr esto, en primer lugar, debemos entender qué es una
actividad sospechosa o irregular, la cual es definida según el Diario Oficial
N° 085 (Julio de 2013), como:
“Todas aquellas
operaciones que se encuentran fuera de los patrones de transacción habituales y
las que no sean significativas pero sí periódicas, sin fundamento económico o
legal evidentes, y todas aquellas operaciones inconsistentes o que no guarden
relación con el tipo de actividad económica del cliente”
Por lo tanto, si definimos el Riesgo de Lavado de Dinero y
Activos como la probabilidad de verse involucrado en una actividad sospechosa,
éste a su vez se ve directamente relacionado con el riesgo operacional, el
legal y el reputacional; y en consecuencia, la administración de dicho riesgo
requiere más que un simple enfoque en el efectivo puramente dicho. Es decir,
demanda de un conocimiento integral del funcionamiento del negocio, de cada una
de las operaciones que realiza, de los clientes y de todos los grupos de
interés con los cuales se relacionan, y en general de todo el entorno en el que
se desenvuelve una empresa.
De manera general, las implicaciones que conllevan las
actividades de lavado de dinero y activos son muchas, tanto para las empresas
que se ven involucradas en ellas como para el sistema económico en el cual se
desarrollan. Según Chena (pág. 10) entre los efectos que produce el lavado de
activos a largo plazo se destacan:
●
La entrada y salida
de grandes capitales de activos “sucios” puede influir en la tasa de cambio y,
consecuentemente, en la variación de los precios en relación a determinados
bienes y servicios.
●
Las organizaciones
criminales que intentan blanquear dinero sucio desplazan en su intento a las
estructuras tradicionales de producción. En consecuencia, se pierden las
capacidades productivas legítimas y aumenta la dependencia de las importaciones
del país, con efectos negativos para la balanza comercial.
●
Los sujetos
involucrados en el LA generalmente no buscan invertir en donde les sea
económicamente más redituable sino más bien donde puedan disimular con mayor
eficacia el origen ilícito de los fondos.
●
La presencia de
organizaciones delictivas desalienta los planes de inversores que pretendan
incorporar capitales legales en cualquier sector de la economía, por
consiguiente, cuanto mayor sea la incorporación de capitales ilegales, mayor
también será el estado de corrupción política.
●
En última instancia
el poder económico y político de las organizaciones criminales puede debilitar
las organizaciones democráticas de gobierno.
Y es precisamente con la finalidad de mitigar hasta lo más
mínimo posible la exposición a estos efectos ocasionado por las actividades de
lavado de dinero y activos, que debemos ahondar en el tema de gestión del
riesgo de lavado de dinero y activos, promoviendo la prevención desde el
interior de las entidades a través de la implementación de un ambiente de
control interno adecuado y eficaz, y con la creación de herramientas para la
correcta y oportuna identificación, valoración, gestión y control de éste
riesgo.
El control interno en la gestión del riesgo de lavado de
dinero y activos
La gestión del
riesgo de lavado de dinero y activos es la metodología diseñada y documentada
para identificar, medir, controlar, monitorear y comunicar los eventos
potenciales del riesgo de LA/FT que afectan las entidades.
Para ello se puede
ejecutar la estrategia de las 5C del control para prevenir el lavado: (Cano,
2001; Hernández, 2005)
1. Concientización y sensibilización: mediante
la descripción de los efectos negativos, tantos sociales, económicos que se
generan.
2. Conocimiento integral del delito: Debido a
que el crimen organizado posee estructuras muy bien definidas es necesario
conocer las etapas que se siguen para poder identificar vulnerabilidades de la
compañía, obsérvese la figura 2.
3. Conocimiento interno y del entorno de la
compañía: identificación de las principales fuentes de riesgos, verificación en
listas negras y el establecimiento de indicadores para su medición.
4. Conocimiento integral del cliente: La
obtención y verificación de la información que el cliente proporciona.
5. Conocimiento de las modalidades e
identificación de controles: Determinar deficiencias y formas de controlar a
través del análisis de las modalidades de lavado de dinero.
De acuerdo al Diario
Oficial N° 085 (Julio de 2013) “la forma
más importante para evitar el riesgo de que se involucre y utilice a las
Instituciones, como intermediarios en operaciones ilícitas, es precisamente la
correcta aplicación del conocimiento del Cliente”, pero si bien es cierto, que
esta es un pilar clave para la prevención del Riesgo de Lavado de Activos, no
debemos dejar de lado los demás aspectos mencionados en párrafos anteriores, ya
que aunque contemos con las mejores herramientas y mecanismos para el
conocimiento de nuestros clientes, en poco o nada ayudarán éstas, si la
exposición a dicho riesgo es generada por la inadecuada utilización o manipulación
de los controles existentes por los empleados o directivos de la entidad. Por
lo tanto, para poder cubrir este riesgo, debemos acudir al establecimiento y
evaluación de controles de forma proactiva y no correctiva para minimizar la
ocurrencia de éste.
Figura 2 Etapas del lavado de Dinero
y Activos, y operaciones que se realizan para la legalidad del dinero sucio.
1.
La primera línea (From Office):
incluye las actividades que involucran el contacto directo con el cliente; y
requiere cumplir con lineamientos regulatorios, establecimiento de un gobierno
y estructura, capacitación del personal y difusión, y la debida diligencia para
cada uno de los clientes.
2.
La segunda línea (Middle Office): se
enmarca en el involucramiento de Junta Directiva, Oficial de Cumplimiento y su
equipo de especialistas en la gestión del riesgo, monitoreo transaccional,
reputacional y la investigación y reporte de cada una de las operaciones
sospechosas, y cumplimiento o desviaciones de la metodología establecida.
3.
La tercera línea (Back Office): a
cargo del Departamento de Auditoría Interna, y de Informática quienes proveen
control y soporte para una adecuada gestión del riesgo, mediante la generación
de información, auditorías periódicas y generación de soluciones tecnológicas.
Implementación
de Herramientas para la Gestión del Riesgo de Lavado de Dinero y Activos
La Contabilidad es una de las
herramientas que pueden ser utilizadas en la detección del lavado de dinero, ya
que esta incluye todas las operaciones que un ente económico ha realizado en un
periodo de tiempo determinado y es la base sobre la cual se toman decisiones.
Además, por el hecho que permite seguir el rastro de una operación, aunque es
importante mencionar que debido al asesoramiento que los lavadores reciben,
hacen que la detección de las operaciones sea difícil, borrando así el origen
de los fondos.
Como parte de los controles en el
proceso de detección del riesgo, se recomienda la verificación de la información que los
clientes presentan a la compañía, con el propósito de detectar comportamientos
u operaciones inusuales o sospechosas.
En el 2001, Cano mencionó que:
Para contrarrestar este flagelo (…)
analizando los estados financieros de las unidades económicas desde una óptica
diferente a la comercial y para ello se recomiendan los siguientes pasos:
1. Analizar que la información contable
esté acorde al sector económico al cual pertenece la unidad de negocio.
2. Evaluar la distribución de la
información en un balance.
3. Identificar las cuentas de mayor
riesgo.
4. Uso del flujo de efectivo para
prevenir el lavado de dinero.
5. Adicionalmente se deben conocer
casos y modalidades de lavado de activos ya investigados en los cuales se
utiliza la contabilidad para registrar estos hechos, lo cual nos permite de manera
preventiva minimizar la ocurrencia de los mismos en las actividades que se
desarrollan.
6. Determinar indicadores para evaluar
riesgos. (p. 92)
Otra de las herramientas
importantes, es la utilización de programas informáticos especializados en el
monitoreo del comportamiento de los clientes, con el propósito de generar
alertas en los momentos que se registren desviaciones al perfil transaccional,
y así poder generar la investigación que se considere necesaria.
Algunos
métodos que podemos utilizar para evaluar el control interno ante el riesgo de
lavado de dinero y activos son: (Cano, 2001)
●
Las matrices de riesgo, relacionado
por una parte los diferentes riesgos existentes y por otra los controles que
existen, para determinar si hay deficiente, suficiente o excesiva existencia de
controles.
●
Los memorandos descriptivos, sirven
para recaudar información de los procesos, descritos y relatados por quienes
los ejecutan.
●
Los flujogramas, que mediante
gráficas reconocidas universalmente, permiten observar los procesos y pasos que
se siguen para cumplir con determinada actividad e identificar los controles
existentes que minimizan el riesgo.
●
Lista de chequeo, que deben de ser
contestadas por los responsables de los controles y sirven para determinar la
existencia óptima de los mismos en los procesos.
Conclusión
Las entidades deben inicialmente identificar los riesgos
potenciales a los que se encuentran expuestas, y así destinar los recursos
necesarios para el establecimiento de la metodología mejor le contribuya a la
prevención del riesgo de lavado de dinero y de activos, y definir los
procedimientos, políticas y controles que les permitan generar los programas de
cumplimiento enfocados en la evaluación razonable y eficaz de los riesgos
identificados, así como dar cumplimiento a los requisitos legales que les compete
conforme a la legislación vigente.
Resguardando así, sus patrimonios de los posibles efectos
económicos que pudieran originarse, ante la materialización del riesgo, ya sea
de forma intencionada o no, que conlleve el deterioro de sus recursos
financieros, así como de su imagen y la de su personal.
La utilización de herramientas como la evaluación de la
información financiera mediante indicadores, uso del flujo de efectivo de los
clientes y la utilización de sistemas informáticos para el monitoreo de las
bases de información generadas por las empresas o instituciones especializadas,
facilitan la gestión del riesgo de lavado de dinero y de activos.
Referencias
Cano C. Miguel Antonio (2001)
Modalidades de Lavado de Dinero y Activos, Prácticas Contables para su
Detección y Prevención. 1ra edición, Bogotá, Colombia.
Cano
C. Miguel Antonio, Lugo Danilo (2001) Auditoría Forense en la Investigación
Criminal del Lavado de Dinero y Activos. 1ra edición, Bogotá, Colombia
Chena, Pablo Ignacio, “Guía para la
construcción de matrices de riesgo de lavado de activos y financiamiento del
terrorismo. Una propuesta en base a la experiencia argentina” Documento de
Trabajo N° 1.
Diario Oficial N° 085, (julio 2013),
“Documentos Oficiales “Instructivo de la Unidad de Investigación Financiera
para la Prevención del Lavado de Dinero y de Activos”
Hernández Q. Hernando A. (2005) Los
Delitos Económicos en la Actividad Financiera, 3ra edición, Bogotá, Colombia.
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